Siempre
has escuchado que los ojos son el “espejo del alma”, pero en este
artículo descubrirás que también, los ojos, reflejan el interés
sexual/emocional de las personas entre si. Muy especialmente en lo
relacionado a la dilatación de las pupilas, según los estudios
realizados por el científico Eckhard Hess, y que han marcado pautas para usar Los
Ojos como Armas de Seducción.
En sus experimentos demostró que los hombres, ante fotografías de
mujeres, unas con las pupilas normales y otras con las pupilas
dilatadas, decidían que las más guapas eran aquellas en las cuales las mujeres tenían las pupilas dilatadas. Lo que le permitió
concluir la efectividad de Los
Ojos como Armas de Seducción.
LOS
OJOS. EL ESPEJO DE LA SEDUCCIÓN
Los
estudios de Hess determinaron que la dilatación de las pupilas,
definitivamente tiene relación con el interés sexual hacía la
persona que se observa. Ya que el estudio determina que el
comportamiento de las pupilas está relacionado con lo que pensamos y
nuestras emociones. Ahora bien, no solo observar si las pupilas de la
otra persona se dilatan es suficiente para usar Los
Ojos como Arma de Seducción.
Hay otros elementos que tomar en cuenta para lograr seducir con la
mirada y lograr usar
Los Ojos como Arma de Seducción.
LOS
OJOS COMO ARMA DE SEDUCCIÓN. ¿QUÉ HACER?
En
la industria cinematográfica y publicitaria se tiene presente la
importancia de Los
Ojos como Arma de Seducción.
Pero… las técnicas para hacer de la mirada un elemento de
conquista varían entre hombres y mujeres.
La
técnica apropiada, si eres una mujer y te interesas en un hombre, la
podemos resumir en las siguientes:
- Al observar el hombre que te interesa, debes buscar lograr un “cruce de miradas”, esto lo debes hacer alternativamente, mirándole y dejando de hacerlo, hasta que se crucen la miradas dos o tres veces.
- Luego de realizar este “cruce” y haber logrado la atención del hombre que te interesa, mantén la mirada en la tercer o cuarto cruce.
- Dado el contacto y se provoque el acercamiento, al iniciar a conversar, lo harás según las siguientes pautas: si eres tu quien habla, mírale fijamente a los ojos. Al ser él quien hable, vele a los ojos de manera furtiva y lleva tu mirada a otra zona de su cara, por ejemplo los labios.
En
el caso de los hombres, tenemos los siguientes tips:
- El “cruce de mirada” es indispensable y valido también en este caso. Realízalo según lo explicado arriba.
- Al estar conversando, usa la técnica de la triangulación. Esto consiste en llevar tu mirada de manera alternativa y pausada al ojo izquierdo, ojo de derecho y la boca de ella. Triangulando, eso será recibido por su subconsciente como señal de “me gustas”.
- Parpadea de manera deliberada de vez en cuando.